domingo, 20 de septiembre de 2009

Qué ironía de vida!


Qué gracioso!
La vida es una ironía, incluso para aquella persona que espera no tener que complicarse la vida! Y si usted, el que lee esto, es una de ellas, va claro, amigo/a!
Incluso cuando nos estamos decidiendo para el qué tomar y el qué no...
Supóngase usted, que se despierta de muy buen humor, simplemente porque tiene ganas (nada extraño quererse levantarse con buen pie). En cuanto se levanta y se pone las zapatillas para dirigirse al baño, lavarse la cara y desayunar... pues bien. Se da un golpetazo del quince! De estos contra la puerta del bacño, de los que el único dedo que sufre es el pequeño meñique, de esos golpes que duelen... y, sin querer, le entran ganas de cantar a lo alto todas las palabrotas que, por educación, había intentado dejar a trás para no causar mala impresión. Pero no! Usted hoy está de buen humor! Qué buen humor? DE BUENÍSIMO HUMOR! E intenta reirse (carcajadas tan falsas como las uñas postizas de la vecina) y lo deja ahí, porque hoy usted, no quiere ponerse de mal humor. Usted sigue por el pasillo hasta llegar a la cocina, y qué se encuentra? Todo tirado! Completamente todo! Y ahora? Pues nada, lo trata de coger con humor y lo recoge.

La mañana ya empieza a ser algo pesada, no cree?
Le entra hambre, pero mira por toda la cocina y no ve NADA! Qué hacer ahora? Pff! A salir, querido/a amigo/a! Además, no es a la tienda de al lado, si no a tres calles de su casa porque es domingo y todo Dios libra!
Se viste, pues, baja muy vagamente por las escaleras. Compra y sube. Algo bien! Pero, qué pasa? Que su buenísimo humor se está un poco como cayendo... Pero todavía tiene! Un poco menos, pero tiene! Y entonces va creciendo el día, solo/a en su casa, con la bata puesta del gandulismo que le da acicalarse un poco más (porque decidió quitarse la ropa después de desayunar) y no encuentra solución alguna que meterse en el ordenador... Allí la gente empieza a decirle cosas. Cosas buenas y MALAS, Que hacen que usted se ponga malo/a también!
Y se acaba el día como similarmente empezó: dirigiéndose al baño, después cruza el pasillo, se da contra la puerta y piensa "Nadie me va a escuchar" y grita forzosamente con gallo incluido "La madre que pa_ió a la pu_a puerta de los pu_os coj_nes!!!!!!!!!!!!!!!"
Y así acaba un día en el que usted, con su mejor fe del mundo, QUIERE empezar bien, pero el DESTINO quiere lo contrario... Por algo en concreto? Puede! Pero nunca estarán el destino y usted de acuerdo!


Moraleja?
Las cosas suceden a su debido tiempo.
Pero llegan esas cosas? Claro! Tarde muchas veces, pero llegan!

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